Durante sus más de siete décadas de
trayectoria, la entidad financiera ha sido cuestionada por sospechas de lavado
de dinero.
ROMA, ITALIA (27/JUN/2013).- A poner
orden en las finanzas. El Papa Francisco nombró una comisión de cinco miembros
para que investigue el Instituto para las Obras de Religión (IOR), el Banco
Vaticano, cuestionado desde hace décadas por sospechas de que sirve para el
lavado de dinero, anunció la Santa Sede.
En sus 71 años de historia, el IOR ha sido
vinculado al fraude y al lavado de dinero y está
siendo investigado por los jueces italianos. Sin embargo, en los últimos años
se ha esforzado por una mayor transparencia.
La comisión estará compuesta por cuatro prelados
—dos de ellos cardenales— y por Mary Ann Glendon, una profesora laica en la
Escuela de Leyes de Harvard y ex embajadora estadounidense ante la Santa Sede.
El grupo preparará un informe tras analizar todo el trabajo del banco.
El Papa creó el comité porque “quiere conocer mejor
la posición legal y las actividades del instituto de modo de que estén en mayor
armonía con la misión de la Iglesia Universal y la Sede Apostólica”.
La medida parece confirmar las expectativas de que
el Pontífice quiere reformar de manera radical la Curia Romana. Nombró además
otro comité para que proponga reformas en este sentido, que se debatirán a
partir de octubre.
Desde su elección hace tres meses, el Papa evitó
todas las muestras de pompa y protocolo y mencionó que instituciones como el
IOR son
“necesarias sólo hasta cierto punto”, a la vez que
se manifestó a favor de una “Iglesia pobre, para los pobres”.
Hace dos semanas nombró al monseñor Battista Mario
Salvatore Ricca, como el nuevo secretario de los encuentros de la comisión
cardenalicia de vigilancia del Banco Vaticano, una decisión considerada como su
primer intento por aumentar los controles sobre la institución.
Por otra parte, el Papa Francisco parece dispuesto
a aprobar el proceso de reforma de la orden religiosa de los Legionarios de
Cristo, que fue deshonrada por las revelaciones de que su fundador Marcial
Maciel fue un pederasta.
En una carta hecha pública ayer, confirmó que la
orden convocará a una asamblea general a principios de 2014 para elegir a un
nuevo liderazgo y aprobar “las nuevas constituciones”.
“Estos son pasos imprescindibles para el camino de
una renovación auténtica y profunda de la Congregación de los Legionarios de
Cristo”.
La Legión, fundada por el fallecido clérigo
mexicano Marcial Maciel, quedó bajo supervisión directa del Vaticano en 2010
después de que una investigación de la Iglesia concluyó que Maciel abusó
sexualmente de seminaristas y procreó tres hijos.
El Vaticano supo durante décadas de los abusos de
Maciel pero lo siguió exaltando como un modelo de fe por la conocida ortodoxia
de la organización y por su capacidad para atraer dinero y vocaciones
sacerdotales.
Con información de EFE y AFP
TELÓN DE FONDO
Credibilidad deteriorada
El Banco del Vaticano fue fundado en 1942 por el
papa Pío XII. Ahora, con activos por siete mil 100 millones de euros, maneja
miles de cuentas de religiosos en todo el mundo.
Escándalos como la quiebra del banco Ambrosiano de 1982, que involucró a
la mafia, masonería y servicios secretos estadounidenses; así como un reporte
de julio de 2012 realizado por Moneyval — el órgano de control del Consejo de
Europa para la lucha contra el blanqueo de capitales y la financiación del
terrorismo—, que muestra deficiencias en los estándares internacionales para
combatir el lavado de dinero y otros crímenes financieros han manchado la
credibilidad de la institución. En los últimos años, el Vaticano ha tomado una serie
de medidas para mejorar su historial en cuanto a supervisión bancaria, pero no
lo ha logrado.
No hay comentarios:
Publicar un comentario