La discusión sobre cultos peligrosos es frecuentemente evadida por grupos religiosos cuyo poder trasciende los límites que deberían establecerse. El caso más obvio de esto es la Iglesia de la Cienciología, la cual, además de poder legal, tiene un poder mediático que puede llegar a ser espeluznante.
Con este poder mediático, el grupo ha logrado en gran parte suprimir divulgación acerca de sus prácticas que pueden ser calificadas como poco éticas o incluso crueles.
El Agujero es un ejemplo de las historias de las cuales la Iglesia ha evitado una profunda divulgación. El nombre de "agujero" no es oficial y se desconoce su nombre interno.
En sus instalaciones, ejecutivos del grupo religioso son virtualmente secuestrados por meses o años. Estos ejecutivos son enviados a este edificio por "mala conducta" y una vez dentro son víctimas de constante abuso físico y psicológico.
En el artículo previamente enlazado aparece parte de la historia de Mark Rathbun, ejecutivo de la Iglesia de Cienciología, quien logró --físicamente-- escapar del Agujero.
Lo poco que se desconoce acerca de las operaciones dentro del Agujero fue divulgado por miembros pasados del grupo. Una vez fuera, estos ex-miembros son receptores de facturas exorbitantes por salirse del grupo ("freeloader bills") y son sistemáticamente aislados de su familia y amigos.
No hay comentarios:
Publicar un comentario