En
su libro “El Corán y las mujeres”
Asma Lamrabet pone de manifiesto la relación directa del ser mujer musulmana
con lo que plasma el Corán y la interpretación de éste hecha por la comunidad
musulmana. Para la autora el acceso a la educación y al saber permiten que la
mujer elabore su propio criterio de lectura y pueda así tomar una postura
compartiendo y defendiendo este ámbito frente a la comunidad islámica.
Como musulmana y estudiosa del Corán
la autora pone de manifiesto que dentro de una tradición patriarcal, en un
contexto característico por sus tradiciones de dominación del hombre sobre la
mujer los escritos del Corán son interpretados de esta forma, sosteniéndose en
una supuesta sacralidad universal de concebir a la mujer como inferior por
mandato divino. Sin embargo la autora encuentra que en el mismo Corán la mujer
es reconocida, respetada, admirada y concebida como un ser capaz al igual que
el hombre.
Resulta interesante pensar en el
contexto específico en el que se escribió el Corán, las reglas, pensamientos y
creencias que sin duda tuvieron gran influencia y se reprodujeron en estas
escrituras. Así como también la misma Biblia o la Torah que representan toda
una época con sus múltiples cuestiones. Es importante pensar en los tiempos en
los que surgieron estos escritos y comprender las premisas de la época pero
sobre todo es importante comprender que hoy en día lo que se vivió ya no toma
el mismo sentido, las posiciones de lo que es lo femenino y lo que es lo
masculino han cambiado.
No se puede hacer de una época una
interpretación de mandato divino y con esto me refiero a que la esencia de lo
que proponen estos escritos sagrados es lo que debería tomar sentido en este
tiempo presente no la cuestión literal
pues guiándose de esta forma se persigue una imposición injusta, que a
los ojos del presente resulta inaceptable o deja la sensación de conocer a una
divinidad emergida en las injusticias humanas.
A
continuación les presento una parte del libro de Asma Lamrabet (2011) en el que
explica lo ya comentado:
El
lenguaje del Corán ¿un lenguaje masculino?
Hemos visto cómo el Corán
habla de las mujeres, a través de los ejemplos de personajes femeninos
ilustres, descritos con mucha, belleza y elocuencia.
La palabra divina se presenta así para rehabilitar lo que
los prejuicios sociales han perpetuado sin cesar en nombre de una sacralidad
aceptada universalmente: la discriminación de la mujer, como ser
estructuralmente débil y destinado a la subordinación.
A través de relatos coránicos de estas mujeres, se
percibe una constante voluntad de reconocimiento y valoración de esa identidad femenina
eternamente dañada. La mujer como vector de la fe: ahí surgía una nueva
concepción de lo femenino y sobre todo el anuncio de un proyecto libertador
dotado de sentido para el contexto actual.
Porque sobre todo habría que ser capaz de tener siempre
presente el contexto de la revelación: un contexto patriarcal intransigente en
el que la mujer no era considerada como un ser humano digno de ese nombre. Fue
en el seno de esa sociedad beduina de ásperas costumbres, ancestrales
tradiciones, implacablemente misoginias y que hacía abstracción de la naturaleza
femenina, en la que el Corán reveló sus modelos femeninos de mujeres musulmanas,
creyentes e inteligentes: la soberana ilustrada, la santa, la educadora, la
sabia, la resistente, la pasionaria, tal y como las hemos descubierto a través
de Bilquís, Mariam, Asia y las otras.
Junto
a la palabra divina que habla de las mujeres existe aquella que habla a las
mujeres, directa, íntima y solemnemente….
Es
cierto que el Corán es la palabra divina destinada a todos los humanos,
independientemente de su sexo, etnia o color. Una palabra que apela a la parte
más noble del ser humano: su alma, su razón, su inteligencia.
Los
sabios musulmanes están más o menos de acuerdo acerca del hecho de que el
discurso formulado en masculino por el Corán engloba de forma sistémica al sexo
femenino y que la palabra divina en general concierne por tanto a los hombres y
las mujeres sin distinción. El masculino
es utilizado en el Corán como género neutro y de la palabra masculina se sobreentiende el
ser humano universal. El término hombres o riyal en árabe es polisémico y
significa también una élite de hombres y mujeres. Esta característica
lingüística no es exclusivamente del árabe. El resto de las lenguas utilizan el
masculino como género neutro. ¿El término hombres en español no engloba también
a los seres humanos en general? Por otra parte, esta formulación de palabra
hombre como categoría universal está siendo puesta en tela de juicio
actualmente. Éste es el caso de la terminología utilizada en la declaración
universal de los derechos del hombre y no pocos intentan precisamente remplazar
por derechos humanos.
No
obstante, el texto coránico utiliza el género femenino en circunstancias
precisas y emplea en este caso un lenguaje estrictamente femenino, con el
objeto de llamar la atención a las mujeres en particular, responder en
peticiones inscritas en un contexto determinado o reparar una injusticia
sufrida por ellas. La palabra divina desciende de los Cielos sólo para ellas,
como si quisiera liberarlas, rescatarlas de unas costumbres esclerosadas,
darles un nuevo hálito… como si quisiera
demostrarles mejor su amor.
Lamrabet,
A. (2011). “El Corán y las mujeres.
Una lectura de liberación”. Segunda parte: Cuando el Corán habla a las
mujeres. P.121-123. España: Editorial Icaria.
No hay comentarios:
Publicar un comentario