Pensar la religión: Gobierno islandés y la religión

lunes, 3 de mayo de 2021

Gobierno islandés y la religión

En Islandia la religión oficial del estado es luterana. Conocida como la Iglesia Evangélica Luterana de Islandia que practica el cristianismo del tipo luterano. Sus creencias son consideradas únicamente de la Biblia, Rechaza al papa como autoridad cristiana, No acepta imágenes de santos, rechaza a la Virgen María, cree en el cristianismo primitivo, y los sacerdotes son los mediadores de la palabra entre Dios y los creyentes. Ellos pueden tener familia y ejercer actividades con fines de lucro.

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A pesar de ser la religión oficial del estado si los islandeses quieren dejar de ser luteranos tienen que escribir al gobierno y abandonar esa confesión; por otra parte, si rellenan un formulario, pueden iniciar su propio culto y recibir una subvención.

Los artículos 62, 63 y 64 de la constitución islandesa, habla sobre la libertad de expresión religiosa. Quienes no deseen pertenecer a ninguna asociación religiosa deberán de pagar una cuota a la universidad de Islandia. Y quienes si lo perteneces deberán de pagara la cuota a su dicha posición religiosa.

Articulo 63

“Todas las personas tienen derecho a formar asociaciones religiosas y a practicar su religión de conformidad con sus convicciones individuales. Sin embargo, no se puede predicar ni practicar nada que sea perjudicial para las buenas costumbres o el orden público.”

Sin embargo, esta libertad a causado mayores abandonos a la iglesia luterana y por ende una separación de estado, iglesia. En una encuesta del 2016 mostro que menos de la mitad de los islandeses jóvenes estaban inscritos en alguna confesión religiosa, y más del 40% se consideraban ateos. De hecho, el 93,3% de los menores de 25 años consultados no aceptaban como real la historia de la creación reproducida por la religión católica.

Otra creencia muy usual en Islandia es sobre la existencia de un Huldufólk que significa "pueblo escondido". Es un mito muy creíble, no considerado religiosa, que afirma creer en pueblos invisibles y maravillosos y en la presencia de troles y elfos en el país.

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