martes, 6 de julio de 2010

Un milagro, una revelación en oración

Sin lugar a dudas, Dios existe y se manifiesta a cada uno de nosotros de muchas y diferentes maneras, el quiere que creamos, pero nosotros muchas veces no podemos, o no queremos creer y tiene que pasar algo muy fuerte para que el se manifieste ante ti y te muestre que existe ÉL y que la salvación de ÉL también existe, permitanme platicarles dos anecdotas, no muy cortitas, no muy larguitas, que demuestran el por qué es que yo creo en DIOS y le creo a DIOS.

La primera va mas o menos así, había una vez en un reino muy muy lejano una princesa que..., esperen, eso no es verdad, pues es entonces esta, en una galaxia hace mucho tiempo, tan tan tan tan tannnnn..., hay no, eso es star warses, pos ok, ya va ora si ya hablando enserio. Hace al rededor de mas o menos 5 años, un primo mio llamado Jesús, que todos carichosamente llamabamos Chuy, se accidento en una moto, pues lo chocaron unos de una camioneta, esto le ocasiono paro cerebral y todos sus organos internos quedaron aplastados pues la moto le cayo ensima, el padre lo alcanzó a santiguar y a darles los Santos Olios, pues "casualemente" pasaba por ahí, como si esa palabra pudiera utilizarse, era la mano misma de Dios.

Estando en el hospital, en los últimos intentos de darle una oportunidad de vida, mi tia, su madre, la de él, alcanzó a llegar y darle el beso de despedida, a decirle que lo amaba y a entregarselo a DIOS, diciendo a los doctores: ya por favor, ya dejenlo ir en paz. Los doctores lo desconectarón y en efecto, algunos minutos después, murió. Un día, yo estaba en un grupo de oración dirigido por uno de los estudiosos de la biblia, José González Martínez, habían pasado dos semanas o tres, que se yo, de todo eso, y estaba incado orando, cuando de repente una extraña luz envolvio mi mente y después, una voz apacible pero fuerte y poderosa me dijo: "¿CONOCES A ESTE?", y se me mostraron fotografías de mi primo con un pantalón de mezcliya y una playera negra y tenis obscuros, peinado para atras como siempre lo hacía, y después de un rato escuche la misma voz que me decía "PUES ESTE YA ESTA EN EL CIELO", volvio la normalidad, casí me soltaba en llanto, pude soportarlo, pero me hizo creer más en DIOS, ya no podía dudar después de esta prueba, me era imposible, después se le manifesto a más personas en sueños y visiblemente a su mejor amiga para despedirse de ella, pero esa es otra historia.

Ahora va la otra historia chiquita, esta esta más cortita y empieza más o menos así. En el reino de Lior, donde las claymore mataban a los yomas y vivian los tres cerditos felices por siempre..., esperen, como pueden vivir felices por siempre si viven rodeados de mounstros, no no no, así no es, más bien los tres cerditos estaban asustados, ¿verdad?, y no era por el lobo, pero esa es otra historia que contaré en otra ocasión. Mi verdadera anecdota empieza cuando yo tenía 15 años, recuerdo que mis primos, mi hermana y yo, jugabamos placidamente en la casita pequeña de dos pisos y 20000 cuartos de mis primos a las escondidillas, eramos unos niños la neta, pero en fin, cuando de repente llego la hora estratega de escapar del general paquito, y al tomar una tajada por la esquina de la calle comedor al gran parque del bosque que estaba en la cochera, no se percato de que había una puerta de cristal completamente limpiada y cerrada frente a él (el general paquito soy yo), y la cruzó corriendo, pues pobre del general que al llegar al frente del bosque, le cayo todo el cristal encima. Cuando desperte después de unos segunditos, me di cuenta de que estaba vivo, pero que tenía mucha sangre en el cuerpo, desesperado y temblando, me levante rapidamente, empezando a gritar como loco, pues sentía dolor, después de escuchar mis alaridos de niño griton y escandaloso, mis tios, mis padres y mis primos se reunieron conmigo, todos lloraban de verme así, empezaron a limpiarme, y me pidieron que caminará, al caminar sentía mucha agua en la rodilla del lado izquierado de mi cuerpo y dije: siento la rodilla mojada, de repente mi tía grito y dijo: répido, metanlo al carro; efectivamente, era sangre.

Pa no hacercelas largas compadres y comadres, el doctor me dijo que había una posibilidad de que ya no pudiera ver de un ojo pues un vidrio estuvo a punto de traspasarmelo, pero "por suerte" cayó a un ladito, con 4 puntadas de por medio, pero lo mas impresionante, 21 puntadas en la rodilla, pues dijo que era una herida demasiado profunfa, pudiendo meter los dedos completamente dentro de ella y diciendo: que suerte que no toco ni tendones ni ligamentos, podrá caminar, y este chico es demasiado juguetos, todo el tiempo durante la operación se la paso platicando y riendo conmigo, que divertido; si como no, divertido pa él que no le dolia eda?, pero en fin, la mano de Dios se volvio a extender sobre mi, salvando mi vida, ¿qué les parece?, ¿no creen que Dios existe?, para mi esto fueron pruebas, ¿para ustedes no?

1 comentario:

  1. La participación de Francisco no lleva a un aspecto central de la religión y que no alcazamos a tocar: La experiencia religiosa. Para algunos autores en ella radica la esencia de la religión. Frente a la experiencia la teoría pasa a un segundo plano.

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